Finestras fue uno de los últimos asentamientos en quedarse deshabitado, aunque no abandonado del todo, ya que en época estival, todavía podremos ver a alguno de sus habitantes disfrutando de este hermoso lugar.
El tiempo lo ha respetado y nos ha regalado una de las mayores formaciones geológicas de la sierra, la conocida como “Muralla de Finestras” o “Roques de la Vila” Unos estratos rocosos verticales que forman dos cresteríos espectaculares, y entre en los que se asienta la ermita o castillo de San Vicente.
Desde el albergue es una actividad larga, aunque preciosa y muy tranquila.
Si comenzamos desde el albergue, nos dirigiremos hacia el sur, pasaremos bajo Fet y la torre de las Conclues, para una vez allí adentrarnos en el Congosto de Fet. Pasado este cogeremos bordearemos la muralla de Blancafort para tomar rumbo Norte, y enseguida divisaremos al fondo la muralla rocosa, y poco a poco, según nos vallamos acercando se irá haciendo más imponente.